domingo, 3 de marzo de 2019

"Enganchada" a las emociones



Yo soy la gran estudiosa de mi misma. Me gusta interpretarme para comprenderme. 

Estos días me han pasado ciertas cosas que me han dejado emocionalmente exhausta y eso ha hecho que cometiese algún error -para mí imperdonable- (obvio comentar el error cometido porque sería volver a revivir la intensidad de la emoción y no me apetece). 

Me han dicho que no es un error grave y aunque me he disculpado y la persona objeto de mi error ha sido muy comprensiva, yo sigo sintiéndome mal, muy mal. 

La verdad es que, en general, la gente cuando comprende suele ser comprensiva. Soy yo la que me martirizo. No puedo olvidar con facilidad mis errores.

No puedo trivializar los errores y en esas situaciones me siento literalmente "enganchada" a la emoción de... ¡¡caray no sabría como definirla!!!.. de desconsuelo, de dolor. La tortura mental es tan grande que la somatizo con dolores de cabeza, sudores...

¿Por qué hacen tanto daño los errores cometidos?
¿Por qué a otras personas se les pasa pronto y a mí no?

Pensando sobre ello, creo que es porque mi mente no pone en marcha procesos internos para evacuar, para vaciar emociones y pensamientos dolorosos generadores de ansiedad, sentimientos depresivos o de culpa. Por tanto, estoy expuesta a la realidad y al dolor sin compasión. 

Tal vez la mentira, la negación, la proyección (o desviación de la culpa) tengan un componente adaptativo, de auto-protección, para evitar sentir "el dolor de la realidad" de forma intensa. Deben de ser mecanismos propios del cerebro para salvaguardar la homeostasis emocional y poder enfrentarse a los errores, a las situaciones generadoras de ansiedad, a la culpa. Creo que mi cerebro no tiene ese filtro o puerta de salida para los sentimientos dolorosos. Se quedan ahí por tiempo, por tiempo indefinido. Y si hablo de ellos los vuelvo a revivir porque todavía siguen ahí. No desaparecen como lo hacen en otras personas.

Creo que en esos momento siento la hiperrealidad tal cual y no puedo mentirme a mi misma, no niego mi culpa, no la puedo minimizar, ni trivializar... la siento tal cual sin florituras ni remilgos. Es como sentir el dolor constante de una herida. 

No puedo engañarme a mi misma. Veo la realidad en toda su magnitud. Me dicen que exagero, que magnifico, pero creo que es porque en ellos -al tener la capacidad para trivializar, para dejar de dar importancia a las cosas- sus emociones se van enfriando, por lo que no pueden entender que a mi me sigan durando... durando y durando. Que siga "enganchada" a ellos.

No puedo olvidar, no puedo trivializar y aunque lo racionalice y sea consciente de que son pensamientos exagerados eso no me ayuda a bajar la intensidad de la emoción. La emoción va por libre separada de la razón. 

También me quedo "enganchada" a las emociones positivas. Cuando algo me sale bien, cuando me dan una buena noticia, cuando me proponen un proyecto que me resulta interesante, etc. me quedo imbuida en esa emoción por tiempo. Esa sensación es parecida también a la de la "ansiedad": es una intensidad emocional que me invade, pero no es dolorosa como cuando cometo los errores, pero es un estado de excitación que no me deja concentrar en otra cosa. Es una sensación buena, pero intensa... no se, debe de ser como tener una "sobredosis". En esos momentos, no puedo hacer otra cosa que esperar a que vaya menguando la intensidad. Cabe decir que para sentir una emoción agradable su detonador no puede ser cualquier cosa, sino que tiene que ser algo muy importante para mi y, a diferencia de la emoción de frustración, de enfado, de culpa, va disminuyendo y no deja secuelas, solo recuerdos agradables.  

No siento ser una persona emocionalmente inestable, no tengo altibajos, ni paso de una emoción a otra de forma constante. No traspaso mis emociones de un contexto a otro. Simplemente, creo que me quedo "enganchada" a las emociones producidas por situaciones trascendentales -para mí-, aunque los otros las vean como "no tan graves" o no tan importantes. 

No es una inestabilidad emocional,
es una intensidad emocional


3 comentarios:

  1. No entiendo porque resaltas que te pasa a ti y hablas sobre, obvio que es así pero no me gusta sentir que creas que son tus palabras o sentimientos los que inducen al resto a sentir así. No puedo tomar tus palabras para mí, porque mis circunstancias son diferentes, pero también siento ese vacío de incomprensión en los momentos de enganche que el resto considera insignificantes.

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  2. Me siento en un momento crítico, me desborda mi propia vida. Y me cuesta expresarme, sentirme bien, dejar de lado todo para no explotar. Al descubrir este blog, decidi que necesitaba escribir uno propio para sacar toda la angustia. Gracias

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