martes, 16 de febrero de 2016

"Ser o Tener... esa es la cuestión"



Sé que es una cuestión polémica, pero me gustaría expresar mi opinión personal, que como ya lo dice la palabra es "personal" y, por tanto, no tiene por qué ser compartida por los demás.

No tengo Asperger. Soy Asperger. Mejor dicho "Soy Yo tamizada por mi Asperger"

Antes de nada "soy yo" con mis intereses, mis circunstancias, con mis rasgos de personalidad, pero "tamizados por mi asperger". En mi vida cotidiana, soy una persona más bien introvertida, reservada, callada; pero, en mi caso, mi asperger ha contribuido a que esos rasgos -que pudieran ser "inocuos" en otras personas- en algunos momentos degeneren en bloqueo, mutismo, catatonia que os puedo asegurar no son nada agradables. 

No hay nada de malo en ser introvertido, pero cuando la introversión  enmascara un bloqueo por no saber qué hacer, qué decir al no generar esquemas de acción… la introversión se convierte en un vacío terrorífico. Es como estar perdida en el limbo, en la inmensidad, en la niebla, en el espacio. Es un bloqueo que lleva a la parálisis mental. 

¿Cómo puede ser considerada una mera condición sin más si, a veces, hace tanto daño? Es cierto que he conseguido acomodar mi entorno a mis necesidades y gracias a ello puedo vivir un poco tranquila.

Sí… YO NO ME HE ACOMODADO AL ENTORNO… YO ME HE PROCURADO UN ENTORNO ACORDE A MÍ. Así puedo "sobrevivir" y dar sentido a la vida.

Hay personas que me han dicho que soy "la perfección del asperger", hay quien me ha dicho que soy "una asperger de alto funcionamiento", hay quien me ha dicho: "en ti, el componente asperger es hasta bonito" y yo me pregunto: ¿cómo, estando en el límite del espectro que casi puedo tocar la Neurotipicidad, lo he pasado tan mal hasta que he conseguido acomodar el entorno -lo máximo posible- a mí? Os puedo decir que incluso "acomodando el entorno a mí" mi "asperansiedad" me come todos los días... ¿cómo puede ser esto que vivo, que siento, algo leve, algo sutil, una "mera condición" sin más? 

El asperger es algo que forma parte de mí desde que me levanto hasta que me acuesto. Forma parte indisoluble de mí desde que tengo uso de razón. Influye en mi percepción de las cosas (todavía no interpreto bien los tonos de voz; así, una sugerencia, una llamada la percibo como una orden imperativa que me colapsa). Todavía me desregulo y me bloqueo ante los imprevistos, aún nimios. Cuando veo a mucha gente me ahogo. El ruido me descentra, me enfada, me estresa, me duele. Os puedo asegurar que si pudiera dejar de TENERLO o escoger cuando TENERLO sería fantástico... pero no es así.

En estos momentos, ahora que conozco sobre mi condición "que condiciona", cada vez tengo más necesidad de ser asperger, de no tener que fingir, de no tener que enfrentarme a la gente. La gente me agota. Siiii .... necesito ser asperger y reencontrarme como mi esencia. Después de todo el esfuerzo que he hecho durante tantos años, necesito descansar y ser asperger. ¿Qué hay de malo en ello, en "ser asperger"?

QUIERO SER ASPERGER. Necesito jubilarme del trabajo de ser Común. Sería feliz en casa, implicada en mis Proyectos Mentales, encasquetada en mi bata de hombre XXL, sin peinar, escribiendo, pintando, pensando, apartada de la gente. Necesito el silencio, el silencio de mis pensamientos.

"Tener Asperger". ¿A caso es algo que se tenga y que se pueda dejar de tener?. ¡¡¡OJALÁ¡¡¡. Os puedo asegurar que he hecho todos los esfuerzos posibles para ser una simulación perfecta de lo Común, de la Neurotipicidad. A mis casi 50 años he aprendido a camuflarme por un tiempo en determinadas situaciones (en las que se acomodan a mí), pero todo en mí sigue siendo artificial, programado como cuando tenía 20 años. A esa edad ya intuía que tenía algo "patológico", algo que trascendía a meros rasgos de personalidad e intuía que era algo profundo que iba a ser para toda la vida, mitigado tal vez, pero para siempre... y así es.

He deseado ser común con todas mis fuerzas... DE VERDAD. He llorado a solas, he gritado a solas hasta quedarme adormecida. Si hubiese sabido cómo dejar  de tenerlo, lo hubiese hecho.

Ahora, puedo decir que estoy aprendiendo a quererme tal cual soy. Ya no quiero renegar de mi Asperger. Simplemente lo necesito. Quiero gritarlo y que lo escuchen.



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